Home
>
Analisis
>
Organizaciones
>
Atarraya
>
Urge proteger arrecifes para enfrentar la crisis climática
Atarraya
Atarraya
ATARRAYA publica temas sobre océanos, diversidad marina, protección y restauración de los mares de México,... Continuar Leyendo
3 minutos de lectura

Urge proteger arrecifes para enfrentar la crisis climática

La muerte de los corales pone en riesgo directo al 25 % de las especies del mar que dependen de ellos. Muchas de estas especies son peces que se capturan por pescadores y que son la fuente principal de su ingreso.
01 de septiembre, 2023
Por: Renata Terrazas

Este verano ha sido uno de los más calientes que hayamos vivido. Gente ha muerto por las altas temperaturas, sembradíos se han perdido por la falta de lluvias, en el mar hemos observado temperaturas elevadas y tragedias como los incendios alrededor del mundo se han convertido en señales inminentes de que el clima está cambiando de manera acelerada y claramente no estamos preparados para ello.

El agua caliente del mar ha generado una catástrofe que pocos notan, dado que sucede en el agua, pero que tiene graves impactos: la muerte de arrecifes de coral que son cruciales para la vida marina. La muerte de los corales sucede en silencio.  No hay imágenes dramáticas como los incendios de bosques o manglares destruidos. De hecho, muchas personas no reconocen a un coral cuando está muerto ya que se sigue viendo bello, aún sin color. Pero los animales lo sufren, la vida marina se reduce y los seres humanos sentimos sus estragos.

En Buscando a Nemo vimos que los arrecifes de coral están llenos de color y dan albergue a diferentes peces, tortugas, tiburones y mamíferos marinos; lo que pocos saben es que uno de cada cuatro animales marinos depende de ellos en algún momento de su vida y que, en todo el mar, menos del 1 % está cubierto de arrecifes de coral.

Los corales son colonias de animales diminutos que tienen una bella simbiosis con unas algas microscópicas que les ayudan a obtener nutrientes para crecer y sobrevivir. Sin estas algas, los corales mueren ya que son incapaces de nutrirse solosCuando el agua del mar se calienta, las microalgas se liberan de los corales y estos mueren de hambre. A este efecto se le llama blanqueamiento de coral.

La muerte de los corales pone en riesgo directo al 25 % de las especies del mar que dependen de ellos. Muchas de estas especies son peces que se capturan por pescadores y que son la fuente principal de su ingreso. La pérdida de corales afecta también a las comunidades costeras ya que estas estructuras absorben energía de las olas y evitan que los huracanes peguen fuerte en las costas, por lo que perder corales significa perder vidas humanas ante desastres naturales.

Tenemos que reducir emisiones de gases de efecto invernadero para evitar que las temperaturas aumenten, sí. Eso requiere juntar muchas voluntades y trastocar intereses económicos como los de las petroleras y los países que dependen de ellas. En tanto construimos estos acuerdos debemos trabajar por hacer arrecifes de coral más resilientes para enfrentar mejor la crisis climática.

Es por ello que en Oceana nos hemos propuesto crear las condiciones que protejan y favorezcan los arrecifes de coral de Yucatán, del cual dependen miles de familias de pescadores. Hemos ido de expedición a diferentes arrecifes coralinos y hemos generado la ciencia que permita protegerlos, de la mano de los pescadores. Porque hoy en día no podemos pensar en proteger hábitat sin las personas que dependen principalmente de él.

Sí hay esperanza. Sí podemos salvar al océano, pero tenemos que trabajar juntas y juntos; autoridades federales y estatales, pescadores, prestadores de servicios turístico, organizaciones civiles, comunidades costeras y tú. Sí, tú que me lees y que seguramente puedes hacer más de lo que te imaginas por el océano.

Por lo pronto, te invitamos a que conozcas Arrecife Alacranes a través de una experiencia virtual en la que podrás sumergirte en la estructura de coral más grande en el sur del Golfo de México, de la que dependen más de cuatro mil familias y que debemos proteger.

* Renata Terrazas es directora ejecutiva de Oceana en México en México  (@OceanaMexico).

Subscríbete a nuestro newsletter y síguenos en nuestras redes sociales: FacebookTwitterInstagram y página web.

Lo que hacemos en Animal Político requiere de periodistas profesionales, trabajo en equipo, mantener diálogo con los lectores y algo muy importante: independencia
Tú puedes ayudarnos a seguir.
Sé parte del equipo
Suscríbete a Animal Político, recibe beneficios y apoya el periodismo libre.
Iniciar sesión

Registrate
Suscribete para comentar...
Imagen BBC
La bebé que nació unos minutos antes del terremoto en Marruecos (y espera por ayuda en una carpa con su familia)
3 minutos de lectura

Hay una ira creciente por la poca ayuda que llega a las ciudades y pueblos de las montañas del Atlas.

11 de septiembre, 2023
Por: BBC News Mundo
0

El bebé de Khadija aún no tiene nombre y su primer hogar es una tienda de campaña junto a la carretera.

Nació minutos antes de que se produjera el mortífero terremoto del viernes por la noche en Marruecos.

Aunque Khadija y su hija salieron ilesas, el hospital de Marrakech donde se encontraban fue evacuado. Tras una rápida revisión, les pidieron que se marcharan apenas tres horas después del nacimiento.

“Nos dijeron que teníamos que irnos por miedo a las réplicas”, explicó.

El sismo de magnitud 6,8 sacudió el centro del país, con epicentro a 71 kilómetros de la turística Marrakech. Por ahora se cuentan más de 2.100 personas fallecidas en una decena de provincias y el número de heridos ha ascendido a más de 2.420. Unos 20 minutos después hubo una réplica de magnitud 4,9.

Con su recién nacida en brazos, Khadija y su marido intentaron tomar un taxi a primera hora del sábado para ir a su casa de Taddart, en la cordillera del Atlas, a unos 65 kilómetros de Marrakech.

Pero de camino se encontraron con que las carreteras estaban bloqueadas por corrimientos de tierra y sólo llegaron hasta el pueblo de Asni, a unos 15 kilómetros de su destino final.

Desde entonces, la familia vive en una tienda de campaña básica que han logrado construir junto a la carretera principal.

Multitudes enojadas que esperaban ayuda rodearon a un periodista local en Asni.
BBC
Multitudes enojadas que esperaban ayuda rodearon a un periodista local en Asni.

“No he recibido ninguna ayuda ni asistencia de las autoridades”, nos dijo, sosteniendo a su bebé mientras se protegía del sol bajo un endeble trozo de lona.

“Pedimos mantas a algunas personas de este pueblo para tener algo con lo que taparnos. Sólo tenemos a Dios”.

Khadija nos contó que sólo tiene un conjunto de ropa para el bebé.

Amigos de su ciudad natal les han contado que su casa está muy dañada y no saben cuándo podrán tener un lugar adecuado donde alojarse.

Enfado creciente

Cerca del lugar donde Khadija acampa, la frustración crece a medida que pasan los días y apenas llega ayuda a los pueblos y aldeas de las zonas montañosas al sur de Marrakech.

En Asni, a solo 50 kilómetros de Marrakech, la gente dice que necesita ayuda urgente.

Un grupo de gente enfadada rodeó a un reportero local y le arrojaron sus frustraciones: “No tenemos comida, no tenemos pan ni verduras. No tenemos nada”.

El reportero, en el centro de la multitud, tuvo que ser escoltado y llevado lejos por la policía, mientras la gente aún lo seguía, desesperada e intentando desahogar su ira.

“Nadie ha venido a nosotros, no tenemos nada. Sólo tenemos a Dios y al rey”, dijo un hombre de la multitud que no quiso dar su nombre.

Desde el terremoto vive al margen de la carretera principal del pueblo con sus cuatro hijos. Su casa sigue en pie, pero todas las paredes están muy agrietadas y tienen demasiado miedo para quedarse allí.

Una mujer se para frente a una casa destruida.
BBC
La casa de Mbarka quedó destruida por el terremoto.

Han conseguido volver y coger algunas mantas, lo único que ahora tienen para dormir.

En un momento, un camión pasó entre la multitud. Algunas personas intentaron hacerle señas, esperando desesperadamente que les dejara suministros. Pero el camión siguió su camino, seguido de abucheos.

Algunos dicen que han recibido tiendas de campaña de las autoridades, pero no hay suficientes para todos.

Cerca de allí está Mbarka, otra persona que vive en una tienda de campaña. Nos guió por las calles laterales hasta su casa, en la que ya no puede vivir.

“No tengo medios para reconstruir la casa. De momento, sólo nos ayuda la gente de la zona”, nos contó.

Vivía allí con sus dos hijas, su yerno y tres nietos.

Cuando su casa empezó a temblar, salieron corriendo y casi fueron alcanzados por el derrumbe de una casa mucho más grande que empezó a deslizarse colina abajo.

“Creemos que el gobierno ayudará, pero hay 120 pueblos en la zona”, dijo su yerno Abdelhadi.

Con tanta gente necesitada de ayuda, un gran número de personas tendrá que esperar más tiempo para recibir asistencia.

Línea gris
BBC
Lo que hacemos en Animal Político requiere de periodistas profesionales, trabajo en equipo, mantener diálogo con los lectores y algo muy importante: independencia
Tú puedes ayudarnos a seguir.
Sé parte del equipo
Suscríbete a Animal Político, recibe beneficios y apoya el periodismo libre.
Iniciar sesión

Registrate
Suscribete para comentar...