El Segundo Periodo Ordinario de Sesiones del Congreso de la Unión terminó constitucionalmente el 30 de abril, sin embargo, la Cámara de Diputados clausuró el 27 de abril, mientras que el Senado de la República lo hizo el 29 del mismo mes. La conclusión del periodo se caracterizó por sesiones maratónicas, cambios de sede y la aprobación de minutas en fast track.
Como lo hemos venido haciendo desde nuestro Observatorio Legislativo, cada que concluye el periodo legislativo analizamos lo ocurrido durante el mismo. En este texto te dejamos algunos de los aspectos más importantes.
Ya sabemos que legisladores y legisladoras miden su productividad por el número de iniciativas presentadas y no por las que realmente concluyeron el proceso legislativo y mucho menos en función de la calidad de las mismas. Este periodo no fue la excepción, en total se presentaron 1,117 iniciativas, es decir un promedio de 1.7 por legislador o legisladora. En la Cámara de Diputados 667 iniciativas, mientras que en la Cámara de Senadores 450.
Morena fue el partido que más iniciativas presentó con 304; seguido del PAN con 229, mientras que el PRD fue el que menos presentó con 60 en todo el periodo entre ambas cámaras. Durante el periodo se aprobaron 1 104 iniciativas.
Los datos muestran que las iniciativas enviadas por el Ejecutivo casi siempre tienen tratamiento de preferentes. De las 104 iniciativas aprobadas, 10 fueron enviadas desde el Ejecutivo; los temas de estas fueron: turismo, precursores químicos, así como ciencia, créditos para los trabajadores y temas militares.
Más allá de los números, el contexto juega un papel relevante. En la Cámara de Diputados la oposición no pudo detener la aplanadora del oficialismo ya que al tratarse principalmente de reformas a leyes secundarias estas se aprobaron con la mayoría simple (50+1), de Morena y sus aliados, PT y PVEM. Algunas de las leyes aprobadas versaron sobre mayores atribuciones del ejército en resguardo del espacio aéreo, fideicomisos y control administrativo indefinido sobre el Tren Maya, la desaparición del INSABI y que sus funciones pasen al IMSS-Bienestar, la desaparición de Financiera Rural y la nueva Ley de Ciencia que sustituye al CONACYT por el CONAHCYT, presidido por un nuevo consejo, el cual establecerá los temas en los que la investigación debe centrarse.
Aunque en el Senado de la República la oposición muestra mayor unidad y constituye un bloque de contención importante, la historia no es muy distinta, pues al final la mayoría de Morena y sus aliados se impone y, saltándose el proceso legislativo, aprueba las reformas que para el Ejecutivo tienen más relevancia.
Un tema que este periodo fue particularmente importante es el de las designaciones. El primero fue el nombramiento de consejeros y consejeras del INE, el cual se llevó a cabo en la Cámara de Diputados, donde la oposición también fue un testigo silencioso. Por primera vez en la historia las designaciones se hicieron por insaculación, método más comúnmente conocido como tómbola. En segundo fue la designación de comisionados del INAI, donde el encargado era el Senado; aquí la situación era crítica pues la institución se encuentra paralizada por estar indebidamente integrada. A pesar de la fuerte presión que ejerció la oposición para lograr la designación, y de los mandatos judiciales que se emitieron, la mayoría legislativa no tuvo la voluntad de llevar a cabo los nombramientos.
Hasta ahora en el debate legislativo habían sido protagonistas casi únicos tanto las mañaneras como el Secretario de Gobernación; con las primeras el Ejecutivo ha marcado la agenda del debate mediático, y con el segundo el Presidente se ha asegurado de mantener a una persona casi de forma permanente en el Congreso sirviendo como emisora de sus mensajes a las bancadas legislativas. Sin embargo, en este periodo apareció una nueva protagonista: la Suprema Corte. Ésta a través de las acciones de inconstitucionalidad que han sido de su conocimiento ha impuesto límites importantes a los excesos que se han visto de la mayoría legislativa; parece que el trabajo de control de constitucionalidad de la Corte va a cobrar especial relevancia en lo que resta de esta legislatura.
El balance del periodo legislativo no resulta muy positivo: la polarización entre fuerzas políticas se agudizó, la mayoría se impuso de forma más agresiva, pasando por encima del proceso legislativo. El dialogo entre fuerzas políticas, propio de un órgano legislativo, se perdió. La calidad del trabajo legislativo decayó. El Congreso sigue siendo una de las trincheras más importantes de control hacia el gobierno, pero cada vez parece más difícil contener los embates que si bien ya no son hacia la Constitución, sí son respecto de la ley, sin importar la constitucionalidad de las reformas. Este periodo legislativo evidenció que en 2024 una de las batallas electorales más complejas será la del Congreso de la Unión.
1 Entendemos como aprobadas aquellas que se aprobaron en ambas Cámaras y se turnaron al Ejecutivo para su sanción o ya se enviaron/publicaron en el Diario Oficial de la Federación.
Hay una ira creciente por la poca ayuda que llega a las ciudades y pueblos de las montañas del Atlas.
El bebé de Khadija aún no tiene nombre y su primer hogar es una tienda de campaña junto a la carretera.
Nació minutos antes de que se produjera el mortífero terremoto del viernes por la noche en Marruecos.
Aunque Khadija y su hija salieron ilesas, el hospital de Marrakech donde se encontraban fue evacuado. Tras una rápida revisión, les pidieron que se marcharan apenas tres horas después del nacimiento.
“Nos dijeron que teníamos que irnos por miedo a las réplicas”, explicó.
El sismo de magnitud 6,8 sacudió el centro del país, con epicentro a 71 kilómetros de la turística Marrakech. Por ahora se cuentan más de 2.100 personas fallecidas en una decena de provincias y el número de heridos ha ascendido a más de 2.420. Unos 20 minutos después hubo una réplica de magnitud 4,9.
Con su recién nacida en brazos, Khadija y su marido intentaron tomar un taxi a primera hora del sábado para ir a su casa de Taddart, en la cordillera del Atlas, a unos 65 kilómetros de Marrakech.
Pero de camino se encontraron con que las carreteras estaban bloqueadas por corrimientos de tierra y sólo llegaron hasta el pueblo de Asni, a unos 15 kilómetros de su destino final.
Desde entonces, la familia vive en una tienda de campaña básica que han logrado construir junto a la carretera principal.
“No he recibido ninguna ayuda ni asistencia de las autoridades”, nos dijo, sosteniendo a su bebé mientras se protegía del sol bajo un endeble trozo de lona.
“Pedimos mantas a algunas personas de este pueblo para tener algo con lo que taparnos. Sólo tenemos a Dios”.
Khadija nos contó que sólo tiene un conjunto de ropa para el bebé.
Amigos de su ciudad natal les han contado que su casa está muy dañada y no saben cuándo podrán tener un lugar adecuado donde alojarse.
Cerca del lugar donde Khadija acampa, la frustración crece a medida que pasan los días y apenas llega ayuda a los pueblos y aldeas de las zonas montañosas al sur de Marrakech.
En Asni, a solo 50 kilómetros de Marrakech, la gente dice que necesita ayuda urgente.
Un grupo de gente enfadada rodeó a un reportero local y le arrojaron sus frustraciones: “No tenemos comida, no tenemos pan ni verduras. No tenemos nada”.
El reportero, en el centro de la multitud, tuvo que ser escoltado y llevado lejos por la policía, mientras la gente aún lo seguía, desesperada e intentando desahogar su ira.
“Nadie ha venido a nosotros, no tenemos nada. Sólo tenemos a Dios y al rey”, dijo un hombre de la multitud que no quiso dar su nombre.
Desde el terremoto vive al margen de la carretera principal del pueblo con sus cuatro hijos. Su casa sigue en pie, pero todas las paredes están muy agrietadas y tienen demasiado miedo para quedarse allí.
Han conseguido volver y coger algunas mantas, lo único que ahora tienen para dormir.
En un momento, un camión pasó entre la multitud. Algunas personas intentaron hacerle señas, esperando desesperadamente que les dejara suministros. Pero el camión siguió su camino, seguido de abucheos.
Algunos dicen que han recibido tiendas de campaña de las autoridades, pero no hay suficientes para todos.
Cerca de allí está Mbarka, otra persona que vive en una tienda de campaña. Nos guió por las calles laterales hasta su casa, en la que ya no puede vivir.
“No tengo medios para reconstruir la casa. De momento, sólo nos ayuda la gente de la zona”, nos contó.
Vivía allí con sus dos hijas, su yerno y tres nietos.
Cuando su casa empezó a temblar, salieron corriendo y casi fueron alcanzados por el derrumbe de una casa mucho más grande que empezó a deslizarse colina abajo.
“Creemos que el gobierno ayudará, pero hay 120 pueblos en la zona”, dijo su yerno Abdelhadi.
Con tanta gente necesitada de ayuda, un gran número de personas tendrá que esperar más tiempo para recibir asistencia.